sábado, 14 de noviembre de 2015

VALLE DEL GENAL - 5 PUEBLOS - 14.11.2015



Este año sí, este año hemos cogido a los castaños del Valle del Genal en todo su apogeo otoñal, es decir, con parte de sus hojas verdeando aún, la mayoría de un amarillo intenso y otras ya caídas y marrones en el suelo. El pasado año recorrimos Parauta, Igualeja, Pujerra, Júzcar y Cartajima, casi ná... y el presente pretendíamos hacer lo mismo pero un poquito más hacia el sur, para recorrer Benalauría, Jubrique, Genaguacil, Benarrabás y Algatocín, casi ná...así que no eran las 9:30 horas cuando el Antonio y el que escribe salíamos de Benalauría para internarnos por caminos inmemoriales de este valle, quizás de los más vistosos de andalucía, con paso vivo, pues recordábamos que el pasado año se nos hizo completamente de noche en la travesía hacia el último pueblo, cuando nos encontramos con un lugareño que portaba una cesta a rebosar de amanitas caesareas, preciosas, doradas, listas para morderlas incluso crudas, lástima que hoy no fuésemos de setas... Así que palante que primero sabíamos que teníamos que atravesar un río sin saber el caudal que llevaría, fotos a mogollón, mañana fresquita y muy nublada, menos mal, porque este año la caló no se va ni echándole agua caliente, cuando al poco nuestro gracioso río hizo acto de presencia, río que no es otro que el que le da nombre al valle, el Genal, mucha, mucha agua no llevaba, pero paso no existía así que después de pensarlo y rodear la zona bicheando un poco, decidimos que lo mejor era quitarnos las botas y los pantalones y atravesar las frías aguas como mejor pudiésemos y en efecto nos inmortalizamos con preciosas fotos en calzoncillos y los pies heladitos cuidando de no resbalar.



Parriba y llegada a Jubrique donde nos tomamos nuestra naranjita de rigor. Pueblo precioso con rincones inolvidables y sendita maravillosa hasta bajar de nuevo a un arroyo en dirección a Genaguacil. Siempre hay que bajar fuertemente y volver a subir fuertemente entre un pueblo y otro, pero superadas ambas cuestecitas pues de nuevo en nuestro segundo pueblito llamado Genaguacil. Pueblo aún más precioso y lleno de figuras artísticas por doquier y hasta en sus rincones más ocultos, digno de visitar y cervecita que nos tomamos en un baretillo pero sin animarnos que la faena aún era larga y dura. De nuevo pabajo a lo bestia aunque siempre por senderos y de nuevo el Genal pero ahora con puentecito incluido, así que comida en regla antes de cruzar en una zona recreativa con mesitas de madera y volver a subir hasta nuestro tercer pueblete, Benarrabá, limpio, virgen, auténtico y casi sin pararnos pues de nuevo a bajar y subir y llegar ya anocheciendo a nuestro cuarto pueblín, Algatocín, ya algo desfallecidos, frutos secos y té frío en la plazoleta central y pabajo que la luz se nos iba y se nos fue, así que frontales a la cabeza y seguir unos hitos la mar de monos que nos sirvieron para no perder la senda boscosa de esta parte de la ruta. Al fin, ya completamente de noche, al igual que el pasado año, llegada al quinto y último pueblo, Benalauría, del que habíamos salido esta misma mañana.
Ruta agotadora por el enorme esfuerzo de tener que bajar y subir cinco veces cinco fortísimas bajadas y cinco fortísimas subidas, pero merece la pena, merece la pena andar y sudar y ver y caminar y conseguir llegar a nuestro destino para luego poder rehidratarnos sabiendo que la faena se ha realizado satisfactoriamente y hasta la próxima y como siempre:

SALUD Y FALSOS LLANOS.

2 comentarios:

  1. El Genal tiene tela marinera... ese mismo recorrido, lo hemos hecho nosotros en 2 ocasiones, pero en dos días, pernoctando la primera vez en Jubrique y la segunda en Genalguacil. En una sola jornada, es algo realmente duro de llevar a cabo. Así, que bravo, bravísimo por vuestra actitud, compañeros. Un saludo a toda la cordada.

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  2. Muchas gracias Franeto, tus comentarios son siempre muy bien recibidos por este ahora pequeño grupo de senderistas, pero con muchas ganas de patear montes y de hacer dos rutas en una sola...ya veremos hasta cuando somos capaces de aguantar el tipo.
    Un fuerte abrazo y que nos veamos pronto en la montaña.
    Juan José.

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